Carta abierta del Presidente Alejandro Domínguez al Fútbol Femenino Sudamericano
El Consejo de la CONMEBOL decidió el año pasado, nombrar el 07 de marzo como el Día del Fútbol Sudamericano Femenino con motivo a la antesala del Día Internacional de la Mujer y al inicio de la Libertadores Femenina de ese año.
La iniciativa fue propuesta por María Sol Muñoz, representante de CONMEBOL ante la FIFA y condice plenamente con la misión de la CONMEBOL, que desde el 2016 implementa una política para potenciar y jerarquizar el balompié femenino sudamericano.
A partir de 2016, la CONMEBOL inició un profundo proceso de reparación histórica en relación con la mujer y su lugar en el fútbol sudamericano. En efecto, durante décadas, la Confederación había dejado en el olvido al fútbol femenino, relegándolo a su mínima expresión y negándole hasta el apoyo más elemental. Con el cambio de rumbo producido en ese año y con la puesta en marcha de una NUEVA CONMEBOL, esa realidad viene cambiando rápidamente.
Me gustaría señalar dos elementos recientes en este sentido. El primero, la final de la CONMEBOL Libertadores Femenina, realizada el 21 de noviembre en el estadio Gran Parque Central de Montevideo, Uruguay, entre los equipos de Corinthians, de Brasil, y Santa Fe, de Colombia. Me refiero sobre todo al marco de público, al entusiasmo y colorido de las tribunas, a las emociones que recorrieron ese estadio de un extremo a otro, al bullicio de las hinchadas. Y también me refiero al buen juego colectivo, al talento individual de las atletas, a la entrega sin reservas de todas ellas en busca de la gloria deportiva.
El punto es que la final de la CONMEBOL Libertadores Femenina tuvo toda la calidad y la pasión que se espera de un partido decisivo, en línea con la rica historia y tradición del mejor fútbol del mundo, el sudamericano. Las jugadoras, las árbitras y las técnicas de nuestro continente se han ganado su espacio a fuerza de talento, dedicación y responsabilidad. Nadie les regaló nada. Y la CONMEBOL está resuelta a trabajar sin descanso para que las conquistas se consoliden y el crecimiento se acelere.
El segundo elemento es el aumento sustancial de los premios de la CONMEBOL Libertadores Femenina aprobados para el 2022. El equipo campeón se llevará USD 1.500.000, lo que representa un incremento de 1.600% con respecto al 2021. Por su parte, el club vicecampeón se alzará con USD 500.000, monto resultante de una suba del 900% con relación al torneo anterior. Con ello, no solo el torneo se hará más atractivo y competitivo, sino que se abre la posibilidad de nuevas inversiones por parte de los clubes, con mejor infraestructura y capacitación para sus equipos femeninos.
Son solo dos ejemplos que nos hablan de la fuerza del fútbol femenino sudamericano que, bajo una perspectiva histórica, se encuentra todavía dando los primeros pasos. El fútbol femenino no tiene techo.
En CONMEBOL queremos llenar de niñas las canchas, queremos que las jóvenes jugadoras se sientan valoradas y estimuladas, que se multipliquen las entrenadoras y las árbitras, que las mujeres se empoderen en la dirigencia y en cargos ejecutivos vinculados al deporte. Queremos que el Futuro del Fútbol se escribe con F de Femenino, queremos transformar el futbol femenino sudamericano en un referente mundial. Trabajamos todos los días para lograrlo.
¡Sigamos Creyendo en Grande!
Alejandro Domínguez W-S
Presidente de la CONMEBOL